ESPECIAL E3 2014: Impresiones de Call of Duty: Advanced Warfare


La guerra del futuro, concretamente de 2054, ha tenido cabida en el E3 2014 de la mano de Call of Duty: Advanced Warfare. Gracias a un gameplay se ha podido ver las novedades que se han incluido en el shooter por excelencia gracias a los exoesqueletos, armamento y nuevas máquinas de guerra.


Esta claro que Call of Duty, independientemente de lo que le siga en el título se basa en un concepto muy simple: avanzar hacia adelante liándote a tiros con todo lo que se te ponga en medio y cuantas más explosiones mejor. La variedad radica únicamente en saber que poner durante el camino con tal de darle un aire fresco a la saga y que se parezca lo menos posible a lo visto en juegos anteriores. Para Advanced Warfare ha sido trasladarla al futuro con unos drones más avanzados y exoesqueletos.


El poder del exoesqueleto

Tras sobrevivir a un aterrizaje bastante movido en el que gracias a un holograma en el techo de nuestro habitáculo hemos podido ver tanto la ciudad del futuro como todo lo que nos estaban disparando, llega el momento de ponerse las pilas. Lo primero que llama la atención de la pantalla es que el número de balas y granadas que disponemos ya no están en una esquina sino sobre el propio arma en forma de holograma.


También se pudo ver que con el exoesqueleto tenemos una fuerza sobrehumana ya que podemos echar abajo una puerta de acero con dos simples golpes, también sobrevivir a caídas gracias a una especie de jetpack que llevamos así como saltar grandes distancias. Esto último también pueden hacerlo los enemigos, que evidentemente también tendrán esta tecnología, por lo que se pueden dar nuevos tipos de enfrentamientos y mucho más dinámicos. Por ejemplo, ya no va a ser tan sencillo sobrevivir ocultándose detrás de algo ya que con un salto perfectamente te pueden matar desde el aire.


Nubes de drones, armas láser y granadas voladoras

Por si los exoesqueletos no fueran suficiente parte de la tecnología del futuro se mostró de forma bastante espectacular. Para empezar, si los drones individuales vistos en Black Ops 2 no suponían un reto ahora habrá nubes de drones al estilo de los grupos de centinelas vistos en la trilogía de Matrix. Sobrevivir a esta amenaza no va a ser sencilla y parece que el simple hecho de arrancar una puerta y usarla como escudo no va a ser suficiente.


Tampoco se concibe un futuro sin armas láser. Éstas se han podido ver y consisten en un escudo del que la parte superior desciende para poder disparar haces de partículas contra los enemigos. Además otra funcionalidad vista en las armas que llevan es la posibilidad de lanzar ondas de choque.


Por otra parte Call of Duty se suma a la opción jugable implantada por Ubisoft con Assassin's Creed de, gracias a la vista de águila, identificar a los enemigos y que éstos aparezcan resaltados independientemente de que se oculten detrás de un objeto sólido. Ésto será posible gracias a un tipo de granada.

Y hablando de granadas, ya no vale con llevar varios tipos sino que esta vez consiste en escoger una granada y cuando la tengamos en la mano seleccionar la función que queremos que desempeñe -fragmentación, humo, etc-. Como curiosidad se ha podido ver una que puede mantenerse en el aire y con un propulsor cuando ha localizado al enemigo ir directa hacia él.


A todo esto hay que añadir las naves voladoras y maquinaria de guerra pesada con forma de araña gigante que aparecen en diversos momentos del gameplay así como las secuencias de heroísmo. Por cierto, ¿ha perdido un brazo nuestro protagonista? Por lo visto sí.

En definitiva, un futuro bastante bélico nos espera y con muchas novedades respecto a títulos anteriores de la saga en cuanto a armamento se refiere ya que en términos de historia se apunta a más de lo mismo.
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