El Arte de Assassin's Creed IV: Black Flag
El protagonismo que se le da a Abstergo, empresa bajo la que se ocultan los Templarios en la actualidad, es superior a cualquier juego de la saga hasta el punto de que se puede recorrer libremente su edificio y ver cómo trabajan.
Ubisoft para Black Flag creo un edificio de Abstergo con temáticas tropicales como en la trama del pasado de Assassin's Creed IV con plantas frondosas en el vestíbulo, colores vivos y un aspecto que desde el exterior se pareciese a la proa de un barco y su mástil.
Esto para la fachada y zonas abiertas al público porque la cosa cambia en las plantas bajo la superficie. "Para Industrias Abstergo queríamos transmitir una sensación fría y misteriosa. La sala de servidores de Industrias Abstergo toma su fuente de inspiración de una catedral, de modo que muestre el poder de los Templarios. Su simplicidad es influencia de la Primera Civilización", explica Ubisoft.
Además por primera vez se muestran bocetos de los personajes para el modo multijugador.
También tiene cabida, aunque en menor medida que en El Arte de Assassin's Creed III, el apartado de personajes con Edward Kenway a la cabeza, para el cuál fue un reto la transformación de un ingenuo recién llegado hasta líder público y respetado a la vez que Asesino clandestino".
Para el resto de personajes, sobre todo los piratas reales como Barbanegra, Calico Jack o Charles Bane se explica la documentación histórica que siguieron para su recreación.
Amplia variedad de escenarios
El plato fuerte tanto del juego como de este libro de arte son las ciudades y la enorme variedad de escenarios que lo componen. "Dedicamos meses al proceso creativo, dibujamos paisajes, ciudades, puntos de referencia y ambientes. Todas las ciudades son reales y se han inspirado en localizaciones auténticas. Visitamos La Habana e hicimos muchas fotos para que nos sirvieran de inspiración; estudiamos mapas del siglo XVIII para recrear el perfil de las ciudades y también recreamos los principales puntos geográficos de referencia".
Tienen cabida además de las ciudades principales como Nassau y Kingston, las aldeas de pescadores, la mansión de Edward Kenway, el Observatorio o el Templo Maya.
También se explica y aparecen algunos de los escenarios eliminados como Puerto Príncipe. "Se quería dar la sensación de vértigo al recorrer las calles arriba y abajo al ser una ciudad construida en una pronunciada ladera".
La vida de un pirata
Para el apartado La vida pirata aparecen situaciones características de un pirata y alejadas de los clichés tales como conversaciones alrededor de una hoguera en la playa y un muestrario de armas.
Respecto al Jackdaw, la embarcación protagonista, fue "diseñado para ser pequeño y rápido, tal como querría que fuera su embarcación cualquier pirata. Tampoco queríamos que fuese un barco grande, puesto que nos interesaba que hubiera enemigos amenazadores. La medida de los mástiles es prácticamente exacta pero a partir de este diseño clásico comenzamos a cortar y retocar para darle un aspecto único que solo pueda asociarse a Black Flag".
También aparece su correspondiente sección de galería de bocetos de barcos y batallas navales.
El libro termina con la sección Mundos submarinos con bocetos de los escenarios bajo el agua y donde Ubisoft concluye explicando que "exploramos dos estilos diferentes de criaturas marinas, aquellas que potencialmente pueden hacer daño y aquellas cuya finalidad es ayudar a la ambientación. Para las criaturas letales exageramos los músculos y sus rasgos distintivos de tal modo que fueran fácilmente identificables".
En resumen, 190 páginas cargadas de información sobre considerado por muchos el mejor y más completo juego de Assassin's Creed y por 23,90€ se hace imprescindible para todo aquel coleccionista de merchandising de la saga.
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Assassin´s Creed 4
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