Tomb Raider y su salto a la nueva generación

Tomb Raider está a punto de llegar a la nueva generación con la Definitive Edition. Por ello Crystal Dynamics ha querido explicar cómo ha sido este proceso y el futuro de Lara Croft en PlayStation 4 y Xbox One.

A finales de enero se lanzará para PlayStation 4 y Xbox One Tomb Raider: Definitive Edition la versión del renacimiento de Lara Croft adaptado a la nueva generación. Scott Amos, el productor ejecutivo del proyecto, explicó la cantidad de recursos que ha costado dar este paso con Tomb Raider. "Invertimos una gran cantidad de dinero y un montón de tiempo, todos nosotros pusimos un montón de dinero, nuestros corazones y almas en él y dijimos vamos a llevar este juego que realmente amamos, ponemos todo lo de la última vez, y lo creamos para las nuevas plataformas".

La Definitive Edition incorporará numerosas mejoras gráficas no solamente en el personaje de Lara Croft sino en los efectos ambientales y visuales. Efectos que han llegado a traer de cabeza a Crystal Dynamics. "Solo hacer funcionar el nuevo motor, obtener los nuevos materiales y reconstruirlos para aprovechar las nuevas técnicas de sombreado, las nuevas técnicas de iluminación, todos los nuevos sistemas de partículas y la simulación física son cosas que no podríamos haber hecho la última vez debido a la potencia del procesador. Todos estos matices y detalles que no habíamos hecho antes, no los podríamos haber hecho hasta trabajar en la nueva generación ", resumió el ejecutivo.

Sin embargo Tomb Raider: Definitive Edition no deja de ser una adaptación del 'reborn' que salió a la venta el pasado mes de marzo. Crystal Dynamics ya apuntó hace meses de su intención de continuar la saga de esta joven Lara Croft en la 'next gen', pero para ello hace falta un factor. "Cuanto más sepamos sobre ellas, mejor podremos trabajar en el futuro", explicó Amos quien resaltó que "para nosotros es muy importante trabajar en las nuevas plataformas lo más pronto posible".

Por lo pronto ya se ha comenzado a financiar una secuela de Tomb Raider, considerada como una de las "sagas claves" de la compañía. Esta declaración coincide con la revelación de que fue a finales del pasado año 2013 cuando el último juego de Lara Croft empezó a dar verdaderamente beneficios.

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