Análisis de Batman: Arkham City

Con motivo de la inminente salida del último contenido descargable, La venganza de Harley Queen, y de la edición Juego del Año en verano es necesario recordar las características que convirtieron a Batman: Arkham City en uno de los mejores videojuegos del año pasado y del presente 2012. Regresa de nuevo el Caballero Oscuro.

Argumento

Un año después de los sucesos del primer juego el Psiquiátrico de Arkham quedó destrozado por lo que la pregunta era ¿qué hacer con los supercriminales que albergaban sus instalaciones? La respuesta vino de la mano del alcalde Quince Sharp quien decidió utilizar los barrios viejos de Gotham como prisión, amurallando la zona y creando un equipo de contención para evitar la fuga de los criminales. Nació así Arkham City.

Muy pronto Arkham City se convirtió en una ciudad sin ley donde predomina el instinto de supervivencia y grandes líderes criminales como el Joker, Dos Caras o El Pingüino mantienen una lucha constante por hacerse con el territorio del rival y el dominio de la ‘prisión’. Evidentemente Arkham City tiene sus vigilantes, las tropas Tyger, pero simplemente hacen la vista gorda ante lo que ocurre al otro lado de los muros como si hubiese un plan oculto orquestado por una mente maestra.

Esta falta de control y vigilancia preocupa a Bruce Wayne hasta el punto de realizar discursos sobre los riesgos que puede ocasionar Arkham City pero es secuestrado e introducido en la prisión. Pronto se convertirá en el Caballero Oscuro dentro de un lugar donde están todos los enemigos que el mismo ayudó a encerrar. La noche ha llegado y va a ser muy larga.

El argumento de Arkham City es el primer paso para conseguir una aventura fiel a la leyenda del Caballero Oscuro y comparable al mejor cómic o película que se haya hecho del personaje con sus toques de misterio, acción, sorpresas y giros argumentales al más puro estilo Batman.

Convertirse en el Caballero Oscuro

Si por algo se caracterizó el juego anterior, Batman: Arkham Asylum, es por presentar al Caballero Oscuro de una manera totalmente fiel al personaje e identificable sobre todo el visto en la película ‘El Caballero Oscuro’. Esto no solamente vuelve a verse en Arkham City sino que se supera considerablemente.

En Arkham City los desplazamientos de un lugar a otro estaban bastante limitados pero ahora hay toda una ciudad por la que moverse, ya sea por las calles escalando edificios con la batgarra o simplemente planeando por un escenario cuyas dimensiones se han ampliado y habrá que tirar de mapa en no pocas ocasiones.

Además también se tiene a disposición todo el arsenal de Batman liderado por los clásicos batarangs y seguido por el gel explosivo, la carga eléctrica remota, la bomba congelante, el lanzacabos y los perdigones de humo. También se volverá a hacer uso del secuenciador criptográfico, ideal no solo para desbloquear claves y acceder a zonas cerradas sino también para buscar emisoras de radio y saber qué ocurre por toda la ciudad, y la visión Modo Detective para localizar enemigos a través de objetos sólidos.

Todo esto será de gran ayuda teniendo en cuenta que todos, o casi todo el mundo, es enemigo de Batman y no podrá desplazarse ni una manzana sin tener que enfrentarse a un grupo de prisioneros. La fidelidad del videojuego aparece en el factor de combate ya que se podrá realizar los movimientos y combos a los que nos tiene acostumbrado el superhéroe, aumentando la velocidad conforme más golpes se hayan dado así como atacar desde cualquier lugar (subidos a esculturas en el techo de las paredes o desde trampillas subterráneas.

Toda una ciudad por descubrir

Arkham City muestra una historia que mantendrá el suspense hasta el último momento y en la que, si en el juego anterior aparecían grandes conocidos del Caballero Oscuro, en esta ocasión tanto los enemigos como los aliados se multiplican. Al Joker, enemigo omnipresente de Arkham Asylum, se le suman rivales como Dos Caras, El Pingüino o Mister Freeze entre muchos otros. Sin embargo el papel de cada uno no tendrá la misma importancia y aparecerán tanto como se debería cobrando así más relevancia algunos que no la merecen y pasando de desapercibidos otros que podrían dar más juego. Pero para gustos los colores.

Al margen de la historia principal en Arkham City hay mucho por hacer. Para empezar al mismo tiempo se desarrollan hasta doce misiones secundarias, algunas con una duración mayor que la de la propia trama.

También se desarrolla otra aventura al margen de la vivida por Batman protagonizada por Catwoman (contenido descargable) con sus propios desafios y por si eso fuese poco los enigmas de Riddler vuelven en una misión secundaria dedicada a él exclusivamente en la que se avanzará según consigamos un número determinado cuya cifra total asciende a más de 400. Estos además darán más información sobre los personajes y los sucesos previos al comienzo de la aventura y desbloquear una serie de desafíos para obtener medallas según se superen ciertos retos.

Además el juego está lleno de secretos que no aparecen en el mapa del juego y que son bastantes reveladores ya que proporcionan pistas de cara a una posible tercera parte.

Tal es el nivel de exigencia que el propio Batman acusará el esfuerzo y se materializará en los desperfectos que irá presentando el traje.

Respecto al apartado sonoro es bastante agradable escuchar, sobre todo en los combates, la banda sonora de las películas de Chistopher Nolan y la voz de Christian Bale en el personaje del Caballero Oscuro de nuevo.

En resumen, Batman: Arkham City es una obra maestra que supera a su excelente predecesor con una gran trama, una amplia variedad de misiones secundarias y, sobre todo, permitir al jugador sentirse como el Caballero Oscuro y actuar como él frente a la amplia variedad de personajes de DC Comics que aparecen.